
A decir verdad siempre lo hubo, siempre hubo una niña mirando las estrellas, siempre hubo una chica escuchando la lluvia y cerrando los ojos para imaginar que bailaba bajo ella, siempre hubo alguien escuchando melodías noctambulas para espantar el sueño, auyentar las pesadillas e invitar a los sueños, siempre hubo quien suspirase con una escena de amor y quien llorase con el final de un libro.
Alguien que necesitase ser rescatada, alguien esperando al caballero en el corcel blanco o en lo que fuese que quisiera llegar.
Siempre espere que el invierno se fuera y que sol llegara para dar paso a las noches calidas y llenas de estrellas en la que me reuso a dormir solo para soñar despierta, solo para encontrar acordes en aquellas canciones silenciosas que se obligan a mantenerse bajas para no despertara a nadie en la casa, aquellos acordes que me llevara a un lugar con suerte muy lejano y con suerte mas grande aquel en el que hubiese algo maravilloso para robarlo y despues ponerlo totalmente en algunas en blanco que se esconden bajo mi cama, esas que esperan que los sueños divagantes esos que llegan en noches de insomnio.
Y eso no fue solo una vez... pero que seria de un cuento sin esa frase bueno pues... serian reales
B.M