El invierno habia llegado, invadiendo las calles con su blanca nieve y alborotando los arboles con su frio viento, y alli en medio de toda esa gente,apresurada por llegar a calentarse caminaba Veronika esa chica de cabello negro y largo que el viente jugueteaba con el, con aquel abrigo azul ceñido a su cintura, Daniel la miraba desde la ventana del restaurant la miraba moverse con sus pasos firmes y fuertes, el era otra clase de chico, de la clase de aquellos que observan la vida sin dar opinión, su cabello rubio y lacio lo hacian parecer etereo y liviano su sonrisa encantadora era talvez su mejor rasgo. Pero Veronika fue hacia el al entrar en el retaurant le sonrio mientras se quitaba el abrigo y se sacudia la nieve de su cabello.
Ellos estaban juntos ahora, se habian conocido unos meses atras, en un clima bastante diferente, pues era verano el calor lo invadia todo y las vacaciones tambien; esa noche Daniel habia aceptado la bizarra propuesta de unos amigos de asistir a una fiesta en lugar de quedarse en casa con sus discos, acepto de mala gana, la paso bien un rato , pero se hastio rapido y se fue, a la salida se encontro con Vernonika ambos iban a la misma universidad pero ambos lo ignoraban, ella le sonrio.
-Aburrido eh- refiriendose a la fiesta
- Algo - contesto el alzando los hombros
Y se fueron tomando caminos diferentes, pero esa noche iba a ser diferente, el habia olvidado sus llaves asi que se dirigio al subterraneo y asi ir a la casa de su padre, el lugar estaba vacio, un indigente en alguna banca tal vez, los vagones tambien lo estaban, a esepción de 1 Veronika iba en el , le mostro el asiento a su lado y el acepto.
-No mucho que hacer esta noche vaya- inicio Veronika
-No creo que no-
-¿Tienes planes? -
- No. me voy a casa- contesto el y ella rio
-Acompañame quieres-
- Que va -
Y asi comenzo, ella lo llevo a un lugar de la ciudad que el desconocia un lugar lleno de luces de neon y calles vacias, bodegas por fachada y discotecas en su interior, el no supo cuantas recorio antes de volver con ella al subterraneo y ella lo beso, asi sin avisar, tan inesperado tan Veronika, Daniel llego tarde esa noche pero no basto.
La encontro al siguiente dia en la calle y ella lo tomo de la mano, no lo dejo en todo el dia, recorrieron tantas terrazas que el no conto, habia algo en ella que lo hacia decir si a cualquiera que fuese su pregunta, por el la hubiese seguido al infierno mismo. Y el era todo lo que ella pedia alguien incondicional que la amara como fuese sin cuestionarla ni reprimirla, con quien sentirse segura alejada de su turbulenta vida.
Ese dia dio paso a mas salidas nocturnas sin descanso a tantos lugares luminosos, a tantas calles solitarias, el verano pasaba sin que ellos los advirtieran.
En una ocasión, habia llovido si mal no recuerdo las calles estabn humedas y el calor era aun mas incomodo, vagaban por aquellas calles y ella solto su mano corrio hacia la calle y su tiro en ella, el la siguio y la miro con aquella sonrisa en los labios y que mas daba el tambien se tiro en el pavimento esa noche ambos conocieron el significado de vivir, tan diferente para ambos.
Asi el verano termino, el otoño y sus vientos frios no los hiceron detenerse aun recorrian la ciudad de noche, vagando entre luces de neon y detuviendose para abrazarse, no importaba el frio de afuera ella sabia que si la abrazaba el ,el verano retornaba.
El invierno no detuvo su amor, tan repentino como el cambio de estaciones, nacido entre luces brillantes y calor abrumador.
B.M
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